El miércoles hablamos sobre el centro, sobre cómo mantener el equilibrio en momentos en los que se percibe caos o desorden alrededor nuestro.
Lo primero de lo que me di cuenta fue que hablar del centro es un concepto que no es obvio para todo el mundo. Por eso voy a contarte cómo lo veo yo. Para mi, estar en el centro es lograr estar presente y consciente de mis actitudes, y comportamientos. Poder decidir la manera de actuar y no reaccionar ante cualquier estímulo, sin pensarlo. Se trata de estar presente y mantener el equilibrio emocional. Significa estar enfocada y confiada en mi saber y en mi intuición y actuar desde ahí, más que estar escuchando constantemente las opiniones de los otros o esperando la aprobación de los demás.
Definimos el concepto así: Es poder estar aquí y ahora en presencia, viviendo la vida que se nos presenta en cada momento y siendo capaces de decidir la manera en la que queremos responder.
Fue muy poderoso e inspirador para mi, ver cómo algunas mujeres, después de mucha práctica espiritual, han logrado encontrar su centro y todos los días hacer lo que se necesita para mantenerlo. La meditación, la oración, la respiración, el movimiento corporal consciente a través del yoga, son algunas herramientas que han utilizado. Y sabes cuál otra salió y también me ha funcionado??? El HUMOR!!! Frente a lo que nos sucede, ser capaces de encontrar un espacio para el humor… algunas veces se logra! Y sé que no este el único camino, pero este es uno ensayado, y funciona!
Fue lindo y compasivo, para mi, reconocer que somos, ante todo, humanas, que sentimos y tenemos emociones, y que muchas circunstancias de la vida, todos los días, son estímulos para que perdamos el centro. Y podemos tomar dos caminos, frustrarnos y seguir desenfocadas, o una posibilidad nueva que es perdonarnos por el daño que nos estamos haciendo y respirar para continuar. Suena fácil, no?
….Y entonces, esa fue la otra parte de la conversación: reconocer que no es fácil y que sobre todo, lo que se necesita práctica. Todos los días!
“Find out who you are.
And do it on purpose.
Practice and repeat.
Every day.
Many times a day.
We become what we practice,
so let’s do it on purpose this time”.
Ana Muriel
PD. Una reflexión y enseñanza paralela que me quedó en este círculo es que no puedo ser indiferente a lo que sucede en el día a día en el país, la ciudad o mi entorno, solo para asegurar que mantengo mi centro y no me dejo alterar a pesar del caos. El desafío que tengo, entonces, es actuar, hablar, expresar y generar los cambios que están a mi alcance, desde mi centro.
Un abrazo a todas y hasta la próxima!!!
